24 de abril, 2024, 14:03 pm, 1 minuto de lectura.
El presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó una propuesta que promete cambiar el panorama de las pensiones en México. Esta reforma, que busca renovar el manejo de los recursos de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) , podría entrar en vigor en los próximos días, según lo expresado por el mandatario durante su conferencia matutina en Palacio Nacional.
Se trata de la creación del Fondo de Pensiones del Bienestar en México, cuya meta es acumular aproximadamente US$2.351 millones (40.000 millones de pesos) procedentes de los ahorros no reclamados de las Afores y pertenecientes a personas de 70 años o más que ya no están en el mercado laboral.
Este lunes, la iniciativa fue aprobada por el pleno de la Cámara de Diputados con 251 votos a favor, 199 en contra y 4 abstenciones. El presidente apuntó al 1 de mayo como la fecha a marcar en el calendario, pero a su vez aclaró que el proceso está sujeto a la aprobación final de la ley.
Una de las principales promesas de esta reforma es la posibilidad de que los empleados que sigan trabajando hasta esa fecha puedan jubilarse con el 100% de su salario. Este es un cambio radical que podría brindar un alivio financiero sustancial a miles de trabajadores mexicanos que anhelan un retiro digno.
Pero la reforma no se detiene ahí. López Obrador tiene como objetivo obligar a las empresas que manejan las Afores a que entreguen el dinero de las cuentas inactivas. Esto implica un movimiento importante de recursos que podría impactar significativamente en el sistema de pensiones del país.
El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, agregó más detalles sobre estas modificaciones. Explicó que los recursos no reclamados no se entregarán al IMSS, sino que se destinarán al Fondo del Bienestar, administrado por el Banco de México.
Los legisladores de la oposición anunciaron su intención de impugnar la reforma ante la Suprema Corte. Consideran que el Gobierno está llevando a cabo un “saqueo” al integrar el fondo con dinero de trabajadores inactivos de más de 70 años que no han reclamado de las Afores.
El presidente dejó claro que las Afores no serán el único origen del fondo. Este se integrará con recursos confiscados al crimen por el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (Indepd), así como con las ganancias de empresas del Estado, como la aerolínea Mexicana, el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).