El Tribunal de Primera Instancia de Nanterre en Francia falló en contra de los herederos de Diego Armando Maradona y finalmente la casa Aguttes subastará este 6 de junio el balón de oro que el campeón del mundo obtuvo por su actuación en el Mundial de México 1986.
Gilles Moreu, abogado de los hijos del exfutbolista, dijo que el tribunal sentenció que “la adquisición de bienes por subasta pública excluye la mala fe”, que el vendedor actual actuó de buena voluntad al adquirir el trofeo en una subasta en 2016 y es su propietario legal. Según el fallo, al que accedió, el propietario adquirió un lote de objetos diversos e ignoraba que entre ellos estaba el Balón de Oro.
Según la familia del astro, el trofeo estaba perdido desde 1989 tras un robo al Banco Provincia de Nápoles donde el balón de oro estaba guardado en una caja de seguridad. El argumento de la defensa era que este robo era de público conocimiento, y que la compra del objeto debía considerarse de mala fe.
De acuerdo con el especialista en objetos deportivos de la casa Aguttes, François Thierry, cuando el coleccionista que hoy subasta el trofeo lo adquirió, no sabía de qué se trataba.